Llevar hábitos de vida saludables, estar alerta ante la aparición de síntomas de sospecha, no consumir alcohol, prolongar la lactancia al menos seis meses y valorar el riesgo individual a partir del conocimiento de los antecedentes familiares, son algunos de los consejos aportados por la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), para prevenir la aparición del cáncer de mama, enfermedad que este miércoles celebra su Día Mundial.
Entre estas recomendaciones, elaboradas a partir de las propuestas por el Grupo de Prevención del Cáncer del PAPPS (Programa de Actividades Preventivas y Promoción de la Salud) de la semFYC destacan la necesidad de llevar una alimentación variada, equilibrada, con abundantes frutas y verduras, pescado y aceite de oliva (patrón de dieta mediterránea); y mantener un peso saludable, evitando el sobrepeso y la obesidad en la postmenopausia.
Otros consejos son realizar ejercicio acorde con la edad y el estado físico de cada uno; evitar la terapia hormonal sustitutiva de la menopausia; no demorar la consulta ante un signo de alarma; participar en los programas de cribado aquellas con más de 50 años; y consultar al médico las dudas que se tengan sobre el cáncer de mama.
“La mejor forma de cambiar ésta tendencia es actuando sobre los factores de riesgo modificables”, han aseverado los expertos del PAPPS de la semFYC, tras valorar “muy positivamente” la puesta en marcha de ‘Circuitos Rápidos de Diagnóstico’ en varias comunidades autónomas que permiten que, mediante protocolos establecidos una mujer pueda tener un diagnostico en menos de 20 días después de la primera consulta.
Este mecanismo se puede iniciar cuando la paciente consulta al médico de familia sobre un síntoma o signo que el profesional considera puede ser indicativo de un cáncer. En este sentido, los expertos han subrayado la importancia de no demorar la consulta con el médico de familia cuando se noten bultos o nódulos mamarios; presencia unilateral de ganglios en la axila; cambios y/o secreción por el pezón; cambios en el tamaño o forma de la mama; y cambios en la piel de la mama.
Predisposición genética
“Aunque solo el 10% de los cánceres de mama tienen un componente hereditario, es aconsejable poner en conocimiento de su médico una historia familiar con varios casos de cáncer” para que, en estos casos, el médico de familia pueda derivar al paciente hacia las Unidades de Consejo Genético”, ha explicado el coordinador del Grupo de Trabajo de Cáncer de la semFYC, Fernando López Verde.
Estas unidades, prosigue, especializadas en el asesoramiento genético, deben tener un acceso protocolizado desde Atención Primaria. Las siguientes circunstancias son sugestivas de predisposición hereditaria al cáncer de mama son el acumulo de tres o más familiares de primer o segundo grado con cáncer de mama y/o ovario; o si en la misma rama familiar se han dado dos o más casos de cáncer de mama y/o ovario, o se han dado tumores bilaterales en familiares de primer grado y al menos uno en menores de 50 años, o cáncer de mama en un varón.
Asimismo, también se produce si hay algún caso de aparición de tumores antes de los 35 años; existe algún caso de cáncer de mama y ovario en la misma mujer; o si hay algún caso de cáncer bilateral antes de los 50 años.
Fuente: Jano