Un año de tratamiento con nicotinamida, una forma de vitamina B3, redujo significativamente el riesgo de cáncer de piel común no melanoma en pacientes de alto riesgo, según los resultados de un estudio realizado por la Universidad de Sydney, en Australia.
Los 386 participantes en el estudio tenían un historial de cáncer de piel, lo que aumentaba el riesgo de cánceres de piel adicionales. Tomar una píldora de nicotinamida dos veces al día durante 12 meses, redujo la incidencia de nuevos casos de cáncer de piel no melanoma en un 23% en relación con los controles de placebo y disminuyó la incidencia de las manchas solares precancerosas en torno al 15%.
La nicotinamida es segura, asequible y está disponible sin receta en la mayoría de los países. Los resultados de esta investigación, publicada en New England Journal of Medicine, tienen el potencial de disminuir la carga de salud y el costo económico del cáncer de piel, la forma más común de cáncer en poblaciones de piel clara en todo el mundo.
“Ésta es la primera evidencia clara de que podemos reducir los cánceres de piel usando una simple vitamina, junto con una sensata protección del sol”, dice la autora principal del estudio, Diona Damian, profesora de Dermatología de la Universidad de Sydney y el ‘Royal Prince Alfred Hospital’. “Esperamos que estos resultados puedan traducirse inmediatamente en la práctica clínica. Sin embargo, las personas con alto riesgo de cáncer de piel todavía necesitan tener comportamiento seguro frente al sol, utilizar protectores solares y realizarse chequeos regulares con su médico”, enfatiza.
La principal causa de cáncer de piel no melanoma es la exposición solar. A pesar de las campañas intensivas de protección solar, la incidencia del cáncer de piel sigue aumentando en todo el mundo. En Australia, los cánceres de piel no melanoma afectan a más de la mitad de la población, siendo cuatro veces más común que el resto de cánceres combinados, y cuesta al país más de 500 millones de dólares anuales.
Los tipos más comunes de cáncer de piel no melanoma son el carcinoma de células basales (BCC, por sus siglas en inglés) y el carcinoma de células escamosas (SCC), pudiendo este último hacer metástasis o diseminarse a los ganglios linfáticos y los órganos internos. El BCC rara vez se disemina pero puede causar enormes problemas cosméticos, ya que a menudo se produce en la cara. La nicotinamida tenía una eficacia comparable en la prevención de los BCC y SCC.
En este análisis, 386 pacientes (con una edad media de 66 años) que tuvieron al menos dos tipos de cáncer de piel no melanoma en los últimos cinco años –y por lo tanto fueron considerados como de alto riesgo– fueron asignados aleatoriamente a tomar nicotinamida o placebo diariamente durante 12 meses. La población de estudio reflejó la mezcla de pacientes típicamente vistos en una clínica de cáncer de piel.
La tasa de nuevo cáncer de piel no melanoma fue un 23% menor en el grupo de nicotinamida en comparación con el grupo de placebo. El número medio de queratosis actínicas (manchas de sol pre-cancerosas) en el grupo nicotinamida fue consistentemente más bajo durante el tratamiento, desde un 11% de reducción en tres meses a un 20% a los nueve meses.
No hay evidencia de que pueda beneficiar a quienes han padecido cáncer
El estudio no fue diseñado para probar si la nicotinamida podría beneficiar a las personas en la población general que no han tenido cáncer de piel o si podría ser eficaz en la reducción del melanoma. Mientras que los investigadores esperan poder investigar estas cuestiones en el futuro, actualmente no hay evidencia de que la nicotinamida se debe utilizar en estos marcos.
Este estudio se basa en una década de evidencia de estudios preclínicos y estudios clínicos en etapa incial, lo que sugiere que la nicotinamida mejora la reparación del ADN en las células de la piel dañada por la luz solar. Además, también aparece proteger el sistema inmune de la piel de la radiación UV proporcionando a las células de la piel un impulso de energía adicional cuando están en modo de reparación después de la exposición al sol.
La nicotinamida fue muy bien tolerada, sin diferencias en los eventos adversos, resultados de la sangre o la presión arterial. La nicotinamida es una forma diferente de vitamina B3 del ácido nicotínico o la niacina. El ácido nicotínico suele causar dolores de cabeza, rubor y presión arterial baja, pero estos efectos secundarios no se vieron con la nicotinamida.
FUENTE: New England Journal of Medicine (2015); doi:10.1056/NEJMoa1506197