Las normas de la alimentación son importantes para optimizar nuestra salud.
La ciencia nutricional ha evolucionado enormemente. Las reglas se reajustaron y desarrollaron. Algunas cosas que se pensaban de la alimentación tienen que quedar en el pasado, como éstas:
1. Excederse
Dejó de ser sano comer tres veces al día. Actualmente se recomienda realizar cinco ingestas diarias por tres razones completamente lógicas. La primera es para evitar los antojos que surgen a causa del hambre. Alimentarse con poca fibra, mucha azúcar y grasas trans parcialmente hidrogenadas, provoca un círculo vicioso propenso al sobre consumo. El segundo factor es para elevar la temperatura del cuerpo con más frecuencia. Este efecto termal quema más calorías y almacena menos grasa. Finalmente para evitar comer con hambre. El hambre es traicionera. Porque una vez que tu organismo está satisfecho, tarda 20 minutos en avisarte… así que comiste 20 minutos de más.
2. Ayunar
Aunque dejes de comer el organismo no descansa. Debe alimentarse igual. ¡Claro que recurre a las reservas de tu cuerpo! Pero la insuficiencia nutricional que ocasiona, provoca modificaciones en la estructura y la función orgánica… Al cerebro no le queda más remedio que nutrirse de glucosa y cuerpos cetónicos. Una malnutrición que lesiona las neuronas. El ayuno es una alimentación cerebral anormal.
3. Ignorar lo que comes
Es importante saber cuánto puedes y debes comer. Con base a eso, te conviene elegir. Todo lo que te metes a la boca debe tener un destino. Si no lo tiene, engorda.
4. Carbohidratos simples
Los carbohidratos simples (azúcar y harina blanca) no tienen nutrientes. Son calorías vacías. De hecho, roban vitaminas y minerales al organismo. Muchas personas se ponen temblorosas durante el día porque su consumo de carbohidratos no es el adecuado. Cuando se sienten así se toman un refresco o un dulce. Experimentan una estabilidad momentánea y luego el nivel se les vuelve a desplomar. Toma tiempo descubrirlos, pero vale la pena.
5. Sedentarismo
El ejercicio es parte de la alimentación. No se come, pero activa los nutrientes del cuerpo y acelera el metabolismo. Optimiza el funcionamiento cardiovascular. Fortalece huesos y músculos. Mejora el aspecto físico… ¡El mejor estilo de vida!
6. Tomar poca agua
El 85% de nuestro cerebro y 70% de nuestro cuerpo es agua. Lo que perdemos durante el día, debemos reemplazarlo para mantener sanas e íntegras cada célula de nuestro cuerpo.
Es necesario cambiar nuestros hábitos alimenticios para optimizar el desempeño de nuestro organismo y que nuestra larga vida tenga calidad.
Clínica de Nutrición Biodieta