Muchas son las personas que atribuyen su exceso de peso a la ingesta de pan, pastas y patatas. Algunos influenciados por falsas creencias o dietas milagrosas como la del Dr.Atkins y otros por errores básicos en la nutrición diaria.
Si atendemos a la cantidad calorica aportada por un gramo de carbohidratos y la comparamos con la de el resto de macronutrientes, vemos como no existe una diferencia clara en inclusión energética. Es evidente, que al limitar un grupo amplio como son los carbohidratos la ingesta general de la dieta desciende y es por eso que el peso con dietas mas proteicas parece descender con mas celeridad. Pero olvidamos que al restringir los carbohidratos estamos desequilibrando la alimentación, generando un déficit en micronutrientes que en ciertos grupos de población podría ser muy perjudicial.
Es sabido como la baja ingesta de carbohidratos unida a un incremento en la proteína total de la dieta puede ocasionar trastornos cardiovasculares severos. Por tanto, hay que plantearse una vez mas el hecho de que el peso corporal no es la única variable a analizar, y que contemplarla aislada de las demás variables puede poner en riesgo nuestra salud.
Al final por mucho que los profesionales en el campo de la Nutrición nos empeñemos en marcar las directrices de lo que representa una dieta equilibrada, cada individuo apoyara aquellos procedimientos que les hagan estar mas delgados, realizando su propio experimento seudocientífico al comer. Es aqui donde radica el peligro de las dietas milagro y las restricciones severas que nos benefician a la hora de perder peso a costa de perder salud.
Clínica de Nutrición Biodieta