CERVEZA SIN ALCOHOL: El proceso de elaboración de la cerveza sin alcohol se puede llevar a cabo a través de dos técnicas: una vez elaborada la cerveza tradicional se extrae el alcohol mediante el procedimiento de ósmosis inversa o bien se puede interferir en el proceso de fermentación, deteniéndola en el momento en el que se produce el alcohol. Según la reglamentación Técnico Sanitaria, las cervezas sin alcohol pueden contener hasta un 1% de alcohol en volumen, si bien, las cervezas tipo 0,0 garantizan la ausencia de este componente.
CERVEZA LAGER: Se trata de una cerveza de baja fermentación, con una graduación en torno al 4% de volumen y un color rubio dorado con reflejos brillantes, esta cerveza desprende un ligero aroma a lúpulo con notas suaves y frescas y su sabor tiene un suave toque a malta y amargo.
CERVEZA LAGER ESPECIAL: Cerveza de baja fermentación con un 5% de contenido alcohólico. La caracterizan sus reflejos ambar y los aromas marcados por la malta con notas tostadas y de lúpulo. En su sabor se aprecia la malta con ligeros tostados y un buen equilibrio de los amargos del lúpulo.
CERVEZA EXTRA: Esta cerveza de baja fermentación incrementa su graduación hasta el 6-7% de volumen. También es característico su color de oro viejo con reflejos cobrizos y su olor a malteados con algunos recuerdos a regaliz, lúpulo y lácteos. En boca, se comprueba un sabor marcado a malta tostada y lúpulo con un final largo y un amargo intenso y agradable.
CERVEZA ESTILO ABADIA: Cerveza de alta fermentación con un 6.5% de volumen alcohólico destaca por su color bronce y una espuma ligeramente tostada. Desprende olores que recuerdan al caramelo y a frutas como el plátano y la manzana. Su sabor afrutado y lácteo ofrece un gusto final largo, sabroso y seco.
CERVEZA DE TRIGO: Se trata de una cerveza con aspecto turbio puesto que en muchas ocasiones queda sin filtrar. Suele ser afrutada, ofrece sensación de frescor y toques a especias dulces con un postgusto largo.
FUENTE: Fundación Española de la Nutrición