Esta tapa tiene un gran valor energético y entre los micronutrientes que aporta cabe destacar, especialmente, el hierro de gran biodisponibilidad por encontrarse una proporción considerable de hierro hemo. Consumiendo una tapa de morcilla se cubren las ingestas recomendadas de hierro para un individuo varón entre 20-40 años.
Si acompañamos esta tapa con cerveza tradicional, cubriremos mas de la cuarta parte de las ingestas recomendadas de vitaminas B12 para este grupo de población.
La cerveza de cierto cuerpo, como la Extra, armoniza bien los embutidos cocidos y ahumados, como las butifarras, salchichas, bacon y morcilla.
FUENTE: Fundación Española de la Nutrición