La naturaleza nos advierte de los peligros a través de llamadas perceptivas como son los colores, así los animales venenosos suelen ser de colores llamativos, esta asociación de ideas podríamos hacer con los productos alimenticios en los que se ha utilizado colorantes artificiales.
Los colorantes utilizados para el consumo humano tienen entre sus componentes, derivados de hidrocarburos. Los cuales son nocivos para nuestro organismo, pudiendo ser causantes de los tumores de vejiga concretamente.
El riesgo de desarrollar afecciones agudas o crónicas , depende de la regularidad con la que se ingieran este tipo de productos.
En niños se ha observado casos de hiperactividad y déficit de atención como una reacción inmediata a su consumo, mientras que en adultos se observan dificultad de concentración tras su consumo.
Entre estos productos se encuentran, cereales, dulces, refrescos, jugos, etc. Para evitar estos riesgos derivados de su consumo se aconseja consumir alimentos frescos libres de colorantes artificiales.
Ademas, mucho de estos dulces orientados al consumo para niños vienen presentados como productos con contenido en vitaminas ya que presentan frutas. El colorido del producto puede engañar al consumidor, pero en general no suele haber ni extracto de frutas ni vitaminas, por lo que no deja de ser un reclamo comercial.
Clínica de Nutrición Biodieta