La comida rapida y la bolleria industrial no solo afectan a la salud cardiovascular sino que ademas pueden afectar directamente a la salud mental. Asi lo certifica un estudio realizado en la Universidad de Navarra publicado en el ultimo numero de Public Health Nutrition.
El estudio confirma la relación entre el consumo de comida rapida y depresión. Ademas segun los científicos responsables de este estudio, cuanto mas rápido se ingiere este tipo de comida mayor es el riesgo de depresion.
Una posible explicación de esta asociación es la presencia de grasas saturadas tipo trans en estos alimentos. Su mecanismo de accion esta relacionado con un aumento en la producción de citoquinas y con un empeoramiento en el funcionamiento del endotelio.
Las citoquinas pro-inflamatorias “son sustancias con capacidad inflamatoria que se relacionan con una disminución en la síntesis de neurotransmisores y de factores relacionados con el adecuado funcionamiento neuronal y que se denominan neurotrofinas”. El endotelio es capaz de sintetizar y secretar alguna de estas neurotrofinas, por lo que un funcionamiento inadecuado de este podria llevar a un inadecuado funcionamiento cerebral.
Hay que señalar que en este estudio los individuos participantes no padecían en un inicio la enfermedad mental por lo que la respuesta a la comida basura se puede explicar desde un punto biológico y/o conductual.
Protegerse de la depresión con la dieta si es posible. Ya conocemos el efecto protector de la dieta mediterránea, rica en frutas, verduras, aceite de oliva, frutos secos y legumbres.
FUENTE: elmundo.es