“No fumo, no bebo y no consumo drogas, pero cada dia siento la necesidad de tomar azucar”. Aunque hasta ahora esto parecia el perfil de una persona sana, para algunos cientificos, es el testimonio de una persona adicta.
En febrero, cientificos Norteamericanos publicaron en la revista Nature un articulo en el que se relacionaba el consumo de azucar con el aumento de enfermedades no transmisibles, como la obesidad o la diabetes.
Los autores afirman que los efectos de este aditivo en el cuerpo pueden ser similares a los provocados por ciertas sustancias adictivas como el alcohol y solicitan una regulacion, tambien en los impuestos, que limite sus ventas en los colegios y la edad de compra, como se hace con el tabaco.
Quizas comparar la ingesta de azucar con el tabaco y el alcohol sea algo exagerado, al menos en España. Pero claro, si tomamos los datos de EE.UU en el que se consumen al dia al menos 600 kilocalorias derivadas del azucar, es comprensible el planteamiento científico.
Por esto debemos tomar precauciones antes de llegar a los datos de paises como EE.UU. Sin duda, el consumo desmesurado de azucar puede convertirse en una amenaza global. Esto, por contra, no deberia hacernos demonizar su consumo en personas sin riesgos metabolicos asociados.
Ya sea a través de una maniobra de desintoxicación o de una labor de educación, el frente común de endocrinos y nutricionistas es frenar las impresionantes tasas de obesidad y otras enfermedades asociadas que asedian a la población de la mayoría de los países del mundo.
FUENTE: SINC