En una sociedad donde la abundancia de alimentos esta a la orden del dia, la mejor receta para consumir aquellos productos que resultan mas beneficiosos para la salud es recurrir a aquellos que se cultivan en la zona donde uno vivia. Quizas por esto, una poblacion como la de los esquimales, donde el consumo de pescado recien capturado supone la base de su dieta, ha supuesto que la incidencia de enfermedades cardiovasculares sea casi anecdotica.
La mitad de las calorias que consume esta poblacion proviene de la grasa de los animales recien capturados como la foca, ballena, trucha, pato y sardinas, entre otros. Dado que cazan directamente del mar y no de un criadero, la grasa que posee es de tipo insaturado y rica en omega-3, muy diferente a la que compramos en el supermercado de forma cotidiana. Ademas, consumen muy pocas frutas, verduras y lácteos.
En concreto, los acidos omega-3 de cadena larga como el acido eicosapentanoico (EPA) y el docosahexanoico (DHA) tienen un efecto antiinflamatorio y antitrombotico que protege frente a la arteriosclerosis, el infarto de miocardio y el accidente cerebral vascular.
Un estudio publicado en marzo del pasado año en la revista <<European journal of Clinical Nutrition>> y elaborado por investigadores del <<Cancer Research Center>> en Alaska, EE UU, revela que el elevado consumo de alimentos ricos en omega-3 que ingieren los esquimales reduce, ademas, los marcadores de riesgo asociados a enfermedades derivadas del sobrepeso y la obesidad como la diabetes y las cardiovasculares.
Conviene aclarar que los ácidos grasos omega-6 cuando se consumen en exceso predisponen a la inflamación y a la aparicion de las enfermedades cardiovasculares. Por ello, lo mas importante es que la dieta proporcione, por un lado, la cantidad necesaria de acidos grasos omega-3 y, por otro, que no haya un exceso de omega-6 en la relación omega-3.
A diferencia de otros paises donde se rechaza la piel,las espinas y otras partes del producto y solo se consume la carne, en los lugares mas frios no se desecha nada. Gracias a esta practica, la cantidad de vitaminas y minerales, esta en parte garantizada. Los antioxidantes también juegan un papel importante, ya que el exceso de omega-3 sin un aporte adecuado de antioxidantes podria favorecer su oxidacion y la disminucion de sus efectos beneficiosos.
Al existir menos horas solares los habitantes polares deben tomar suplementos de vitamina D para mantener unos niveles de calcio adecuados.
Aun así, a pesar de ver como la dieta polar es beneficiosa para la salud cardiovascular de sus habitantes , en los últimos años se ha visto un cambio debido a la introducción de alimentos de alta densidad calórica pobres en nutrientes propios de la alimentación occidental lo que esta contribuyendo al deterioro de la salud de sus habitantes, observando un aumento evidente en la obesidad de los mismos.
Fuente: La razón.es (11 Febrero 12)
La alimentacion en las zonas polares se basa en productos del mar recien capturados ricos en omega-3 y 6