Un estudio de la Universidad de Navarra muestra que la modificación del patrón dietético logra reducir en apenas un año el espesor de la capa íntima-media de la arteria carótida.
Una dieta mediterránea enriquecida con aceite de oliva virgen o con frutos secos puede revertir la arteriosclerosis en las arterias carotídeas en sólo un año, según se ha demostrado en un ensayo realizado con 187 voluntarios en la Universidad de Navarra, que ahora publica la revistaAtherosclerosis.
Los participantes, mayores de 55 años y con alto riesgo cardiovascular, se dividieron en tres grupos al azar. Dos de ellos recibieron instrucciones detalladas sobre cómo seguir de forma adecuada una dieta mediterránea mediante entrevistas trimestrales con dietistas nutricionistas formadas para esta tarea y dirigidas por Ana Sánchez-Tainta, especialista en Nutrición Humana y Dietética en el centro académico.
Uno de los grupos recibió 15 litros de aceite de oliva virgen cada trimestre; al otro se le facilitaron frutos secos para que los voluntarios consumieran 30 gramos diarios de nueves, almendras y avellanas. Por último, al tercer grupo se le dieron instrucciones para seguir una dieta baja en grasa.
A todos ellos se les midió el espesor de la capa íntima-media de la arteria carótida por ecografía, tanto al principio del estudio como al cabo de un año. “Fue así”, afirma Sánchez-Tainta, “como que las personas que habían seguido una dieta mediterránea enriquecida con aceite de oliva virgen o con frutos secos presentaban una regresión del grosor de dicha capa”
Respecto a los resultados obtenidos, el director del proyecto y catedrático de Medicina Preventiva de la Universidad de Navarra, Miguel Ángel Martínez, subraya que “una modificación de todo el patrón dietético es capaz de conseguir en un solo año unos resultados que no se alcanzan con los fármacos que se prescriben ni siquiera en dos años de tratamiento”.
Extraído de: Jano.es (Nutrición)